El crucero Libertad
en que mucha gente había,
recogió en su travesía
un rara enfermedad.
Fue una gran calamidad,
comentaba una enfermera,
estaban por donde quiera
luciendo mal encajados
pasajeros aquejados
con tremenda cagalera.
Escucho que últimamente
y no es en todos, espero,
de los viajes en crucero
se queja mucho la gente.
De todo hay, recientemente
fue un grupo de mi trabajo,
y hasta un souvernir me trajo,
uno, que en plena conciencia
me dijo que la experiencia
fue mas buena que el carajo.
Friday, November 17, 2006
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