Hoy, el nombre de Viernes Negro, con el que han denominado los viernes después del Dia de Acción de Gracias, ha cobrado un significado real.
Tradicionalmente, el día después de “Thanksgiving, tiendas por todo el país venden su mercancía a los más bajos precios. La gente sale furiosamente de compras para ahorrarse unos cuantos dólares. Las tiendas anuncian con bombos y platillos sus ofertas de 50 a 75% de descuento y los compradores piensan que no se pueden perder semejante oportunidad.
Los medios ponen su granito apremiando a la gente para que aprovechen este día. Los noticieros locales insertan reportajes sobre las grandes ofertas que tienen estas tiendas y aquellas otras. Los mensajes comerciales de radio y televisión nos bombardean cada cinco minutos recordándonos lo importante que es llegar temprano para agarrar las mejores ofertas. Es la gran oportunidad de comprar todo lo que uno necesita para su lista de regalos navideños.
Este año muchos han sentido la incertidumbre de la economía. La gente no quiere gastar dinero, a menos que, por supuesto, aparezcan ofertas imposibles de rechazar, como las de este día. Así que, mejor no perder la oportunidad de ahorrarnos esos dólares en el Viernes Negro.
Así es como recordará este día la familia de un empleado temporal del Wal-Mart de Bentonville, Arkansas,quien murió aplastado bajo una estampida humana que saltó pestillos, rompió puertas y atropelló a un inocente trabajador, en su furiosa carrera por alcanzar primero los productos con super rebajas.