Hace un par de meses compré unas fruticas y vegetales para decorarlos, tirarles una foto y vacilar con eso en el blog. Entre ellos compré un chayote, porque se presta para hacer una carita muy cómica, añadiéndole solamente un par de ojitos.
Decoré una naranja, una manzana, una pera y el chayote. Les tiré una foto, pero nunca la publiqué y ahora resulta que parece que la borré porque no la encuentro por ningún lado (Ay Juana...que loca estás!)
El caso es que tuve que botar la naranja y la pera porque se pudrieron. La manzana con ojitos, boquita y todo me la zampé un día sin querer. Cuando me di cuenta me sentí caníbal, pero ya el daño estaba hecho.
Sin embargo el Chayote, amigos, el Chayote tiene vida. Al incrustarle un par de frijolitos a modo de ojos, aón cuando lo dejé ñato, él se sintió persona y comenzó a crecer extremidades. En cualquier momento habla.
Mientras tanto sigue ahí, de guardián de los platanitos, las naranjas y cualquier cosa que caiga, atento a todo con sus ojitos negros y creciendo y creciendo...no se hasta dónde.
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