Friday, January 28, 2011

José Marí, en su natalicio

Del Ismaelillo

MI CABALLERO

Por las mañanas
Mi pequeñuelo
Me despertaba
Con un gran beso.
Puesto a horcajadas
Sobre mi pecho,
Bridas forjaba
Con mis cabellos.
Ebrio él de gozo,
De gozo yo ebrio,
Me espoleaba
Mi caballero:
¡Qué suave espuela
Sus dos pies frescos!;
¡Cómo reía
Mi jinetuelo!
Y yo besaba
Sus pies pequeños,
¡Dos pies que caben
En sólo un beso!

José Marí, en su natalicioSocialTwist Tell-a-Friend

3 comments:

La Guardarraya de la Siberia said...

Este poema, junto con el Príncipe Enano, son lo más lindo que alguien le ha escrito a un hijo jamás. Larga vida al Maestro.

Patricia said...

Absolutamente de acuerdo, Guarda. De manera magistral expresa el amor y la ternura que inspiran los hijos.

Mack said...

Este ha sido siempre mi preferido.